Expiación. Más allá de la pasión
Rodeada de un espléndido diseño artístico y vestuario, la cinta nos traslada a la Inglaterra de comienzos de la Segunda Guerra mundial, donde en una familia de buena posición ocurre algo que desencadenará un viaje a los infiernos de los implicados en la trama.
Espléndidos planos-secuencia, para recordar el realizado en la playa con miles de soldados, en una peli que está envuelta en una especie de neoclasicismo visual con bonitos y estéticos recursos de montaje.
Las actuaciones son impecables, impresionante colección de niños-prodigo amparados por actores de prestigio: una Keira Knightley cada vez más anoréxica y un James McAvoy que definitivamente se consagra en este film.
Desde mi punto de vista sobra la presencia final de Vanessa Redgrave, rompe toda la magia de la historia, con un peinado que no se ha cambiado desde que era niña...
En resumidas cuentas, una gran película que como siempre se hace a partir de una gran historia.
Lo mejor: Ambientación. Diseño artístico. Guión
Lo peor: El final con Vanessa Redgrave
Mi puntuación: 5
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