Superman returns
Director: Bryan Singer
Uno de los superhéroes más queridos por los americanos y prototipo del héroe por antonomasia, creado en aquel lejanísimo año 1938. Superhombre del gusto de Nietzsche, encarna el ideal de la raza aria: inteligente, guapo y poderoso.
Explotado hasta el máximo en todas sus vertientes mediáticas, cine, radio, prensa y televisión, vivió su gran momento en las pelis protagonizadas por el malogrado Christopher Reeve, y ahora lo rescata para la gran pantalla Bryan Singer, único atractivo de la peli.
El único interés de la cinta es observar de qué modo se resuelven los efectos visuales. Comparados con las pelis de los 80 suponen un lavado de cara más que notable, pero es que claro, estamos hablando de un salto de casi 30 años. Casi nada.
Hasta aquí llega todo el interés que puede tener una historia repetida hasta la saciedad, con la curiosidad de ver a Kevin Spacey en el papel de Lex Luthor, un personaje que no le va en absoluto.
Lo demás, todo lo ridículo que se puede esperar de algo tan desfasado. Disfraz basado únicamente en unas gafas, tecnología superdesarrollada a base de prismas de cristal, kriptonita mortal ... En fin, dejemos estar a las viejas glorias y comencemos a madurar un poquito, por favor.
Lo mejor: los efectos visuales. La nostalgia de que cualquier tiempo pasado fue mejor.
Lo peor: historia cansina, muy cansina. El desfase cronológico.
Mi puntuación: 4